Pues lo mismo pasa cuando conoces
a alguien a través de Internet y sientes ciertos sentimientos hacia esa persona,
crees que es tu alma gemela porque sois tan afines, y te hace sentir tantas y
tantas sensaciones nuevas y que te hacen pensar que es el, lo que esperabas
hace tanto tiempo. Ese hombre que te llena, que te hace sentir, que te revoluciona
el estomago. Que alimenta tu imaginación, que acelera tu ritmo cardiaco, que
llena de mariposas no tu estomago sino tu cuerpo entero. Del que te has
creado una imagen, un sonido de su voz,
incluso su forma de reír. Y entonces quedas con el le conoces y te quedas
helada, sientes vértigo y se te desmorona
tu fantasía. Entonces hablas con el, das un paseo, os reís juntos y compartís
muchos momentos importantes, y es cuando empiezas a ser consciente de que la
realidad nunca es como la fantasía que uno hace de las cosas, pero el fondo
sigue siendo el mismo, y no dejas de sentir. Entonces te planteas ser amigos conocerle mejor y bueno
si las almas al final se encuentran y se
necesitan pues dejarse llevar. Por lo menos has conseguido alguien muy especial
con quien compartir momentos agradables y alimentar el alma aunque sea de forma dosificada. Alguien que te hace sentir un poquito Reina.
Isaboa
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